Rodolfo Navas: “Durante años hubo parches sobre parches que hicieron que la escuela Boero esté en esta situación”
Durante todo el año la escuela Boero fue noticia en la sociedad por diversos problemas que se suscitaron debido a factores edilicios y a la imposibilidad de que los alumnos permanezcan en el establecimiento entre turnos de clases.
Uno de los últimos sucesos conocidos, fue el de tableros colocados en las ventanas para reemplazar los vidrios rotos por los fuertes vientos que ocurrieron en las semanas anteriores.
El Director de Educación técnica y agro técnica del Ministerio de Educación, Rodolfo Navas dialogó con ESTACIÓN CLARIDAD y se refirió a la actualidad de la escuela y consignó que «Durante años hubo parches sobre parches que hicieron que la escuela Boero esté en esta actual situación».
Uno de los escenarios de conflicto registrados durante el año fue la presencia de alumnos en las inmediaciones de la escuela por no tener un lugar habilitado para comer o quedarse dentro del edificio. Ese inconveniente, según Navas ya está solucionado y «desde el lunes 4 de noviembre los alumnos pueden quedarse en el intervalo de tiempo que hay entre turnos», producto de que se generó «un espacio con comodidades para que puedan comer, y estarán bajo el cargo de dos personas capacitadas».
La declaración de Navas no es casual, porque mediante gestiones de un grupo de padres se había conseguido un sitio y eran ellos quienes acondicionaron y controlaban la permanencia en de los alumnos en el lugar. «La gestión anterior se equivocó al permitir que los padres fueran tomando decisiones. Aprobaron un aula con una capacidad que no se respetó y los chicos quedaban bajo el cuidado de los padres, eso está prohibido».
Navas manifestó además que ese grupo de padres que conformaban la cooperadora «ya no pueden permanecer dentro de la escuela». «Desde este año no existe una cooperadora en la escuela Boero por una decisión de Personas Jurídicas», incluso manifestando que hubo una «multa» desde el ente gubernamental por ejercer una actividad en la institución sin la debida autorización.
Otro de los focos de conflicto se dio por los fondos nacionales que reciben las escuelas técnicas en la Argentina. «Hemos auditado la escuela y no hemos detectado irregularidades en el manejo de los fondos de parte de los directivos», manifestó el director; agregando también que «No se utilizan las aulas taller porque no hay matafuegos renovados». «La escuela tiene 96 en total y no se han recargado este año, están vencidos, y es algo que pasa en todas las escuelas de San Juan».
A todas esas situaciones problemáticas hay que agregarle la del agua. Los padres de los alumnos dicen que el agua de la escuela está contaminada y no es apta para consumo y colocaron dispensers para que no beban agua de los surtidores de la escuela. A eso, Navas destacó que «el Ministerio de Salud hizo un análisis y comprobó que el agua es apta para consumo» y marcó que «Las donaciones de los padres en cuanto a dispensers de agua no es propicia para la institución, porque la gran demanda de agua hace que no funcionen correctamente. De todas formas, los directivos han dispuesto un sector para que puedan estar instalados».
El director señaló que a la escuela concurren «2000 estudiantes» y se puede calcular que «hay 3600 padres, pero las inquietudes son habitualmente de solamente 6″. El resto se «adapta sin inconvenientes a las decisiones de los directivos»